Sí, leíste bien, buenas razones para dejar tu trabajo y es que hay muchas buenas razones para dejarlo, según los expertos profesionales.
La vida es muy corta, por lo tanto ¿para qué quedarse en un trabajo que ya no te sirve? Pero eso no significa que renuncies sin pensarlo bien. Por lo tanto, antes de entregar tu carta de renuncia, asegúrate de tener una buena razón para dejar tu trabajo y un plan claro para lo que sigue.
Aquí tienes las siguientes razones para dejar tu trabajo:
No obtienes ninguna alegría de tu trabajo
Se pasan por momentos difíciles en la carrera, errores con los que se aprenden, pero otra cosa es estar constantemente desconectado y no disfrutar del trabajo, esta es una buena razón para buscar un empleo que te brinde una mayor satisfacción.
No disfrutar del trabajo podría hacerte sentir frustrado y afectar tu vida fuera del trabajo. Incluso llegar a notar que tus hábitos diarios cambian en una dirección negativa. Por ejemplo, tu alimentación se vuelve terrible (o incluso peor) tus patrones de sueño son inexistentes, tu higiene diaria es inexistentes, no ordenas el lugar donde vives, te olvidas de tus buenos hábitos.
La cultura laboral es tóxica
Una cultura corporativa negativa puede hacer que hasta el mejor trabajo sea una experiencia terrible, lo que afecta la salud mental y física. Si notas que no hay forma de mejorar la situación con tus compañeros de trabajo o con la dirección de la empresa, puede que sea el momento de buscar un trabajo con un mejor ambiente laboral.
Lo ideal sería aguantar hasta encontrar un nuevo puesto, pero a veces tiene sentido alejarse del entorno para dar lo menor de uno mismo en la búsqueda de empleo.
No hay espacio para el crecimiento profesional
Si la empresa no tiene programas de desarrollo o crecimiento profesional, es posible sentirse estancado e insatisfecho en el puesto.
En el trabajo, las oportunidades de crecimiento son fundamentales, recuerda que el aprendizaje continuo en más importante en estos tiempos. Por lo tanto, si en el trabajo sientes una rutina pesada y estancada, tal vez consideres ir a otro lado.
Buscas un mejor equilibrio entre vida laboral y personal
Muchos profesionales han descubierto que quieren trabajar de forma remota o en un puesto hibrido. Otros quieren más flexibilidad con sus horarios o con sus vacaciones.
Si aquello es importante para ti y la empresa no está dispuesta a negociar nuevos términos para tu puesto, es posible que desees buscar un empleo que valore más el equilibrio entre el trabajo y la vida personal.
Cuando las políticas laborales de la empresa no te dejan hacer un buen trabajo y hacen que las cosas sean más difíciles, es hora de sopesar los pros y los contras de quedarte o irte.
Tu salario es bajo
La empresa debería compensarlo de manera justa en función de la experiencia y de los años trabajados en ella. Si te has posicionado para recibir un aumento de sueldo, pero la gerencia no está dispuesta, tal vez sea el momento.
Recuerda que un salario base más alto es solo una parte de las negociaciones salariales. También podrías negociar otros beneficios y ventajas, como acuerdos de trabajo remoto, participación en la empresa y tiempo de vacaciones.
No te gusta ni respetas a tu jefe
Si tu jefe es irrespetuoso, poco confiable, deshonesto o muestra otros rasgos de mala gestión, tal vez consideres explorar otras oportunidades.
A veces simplemente la conexión con otras personas no se da; las personalidades y formas de pensar son diferentes y chocan. Si no hay posibilidad de trasladarte a otro equipo en el que estés más en sintonía, es poco probable que disfrutes trabajando en esta situación.
Quieres cambiar de carrera
Cambiar de sector también es otra buena razón. Sin embargo, ten un plan de transición solido antes de presentar la renuncia, ya que es posible que requieras educación o capacitación adicional para calificar para un puesto en un nuevo sector.
Quieres continuar con tu educación
Volver a estudiar a tiempo completo y conservar un trabajo son efectos poco probables. Hablar con tu jefe y ver las opciones que tienes disponible en cuanto a seguir estudiando podría ser una alternativa, ya que continuar con tu educación puede beneficiar a la empresa.
Algunas organizaciones brindan apoyo a los empleados que desean continuar su educación, así que asegúrate de conocer tus opciones.
Tus valores no se alinean con los valores de la empresa
Cuando no estás de acuerdo con los valores de tu empresa, esto puede reducir en gran medida tu experiencia en el trabajo y tu rendimiento. Según la situación, unos valores desalineados pueden ser una razón sólida para un nuevo empleo.
¿Deberías renunciar a tu trabajo?
Dejar un trabajo no es fácil, especialmente si has trabajado para el mismo empleador durante años o no tienes la estabilidad financiera suficiente como para arriesgarte a estar desempleado durante cierto tiempo.
Si estás pensando en dejar un trabajo sin tener otro, asegúrate de tener un colchón financiero que te ayude a salir adelante mientras buscas tu próxima oportunidad.
En ultima instancia, dejar o no el trabajo es una decisión personal. Para tomar una buena decisión, considere los pros y los contras de quedarte o irte. Habla con amigos, familiares o mentores y asegúrate de tener un plan antes de dar el paso.
