La mayoría de las veces que acudimos a algún restaurante, nuestro paladar es conquistado por las obras maestras de chefs que se encargan de crear experiencias gastronómicas verdaderamente sublimes. Otras tantas, a eso debemos sumar un factor importante: la vista, la cual es seducida por la presentación del platillo, misma que desata verdaderas pasiones.
Sin embargo, nada puede compararse al hecho de sumar a estos dos factores ya mencionados uno más: sumergirte en un mundo “alterno”, el cual hará que la experiencia se multiplique al máximo. De esta manera, danzas árabes, historietas que cobran vida o bailes griegos, divierten a los comensales más excéntricos que se dan cita en alguno de los siguientes 5 restaurantes temáticos…
1. Agapi Mu
Platillos típicos del mediterráneo se encierran en una antigua casa de la Condesa. Música griega de fondo y pequeñas presentaciones de los meseros hacen de cada comida o cena una experiencia distinta.
Después de probar un delicioso dolmádes de entrada y mientras llega el suculento plato fuerte, la música sube y los pies comienzan a moverse. Entre las mesas se desata un pequeño festival de bailes típicos propios de este país mediterráneo, guiados por expertos, los comensales pueden bailotear y mover las manos entre las mesas.
Tras un momento de descanso, arni me pita (carnero en pita) deleitará tu paladar. Al final llega lo más divertido, ¡puedes aventar platos y destrozarlos cuántas veces quieras!
2. Comicx
¡BUM! Aquellas preguntas surgidas durante la niñez, tales como ¿dónde comerán los superhéroes? O ¿cuál es el platillo de los “malos”?, por fin encontrarán una respuesta mientras pruebas una suculenta hamburguesa.
En Comicx las aventuras comienzan en las paredes, las cuales están decoradas con historietas, y terminan en la boca. La fantasía se mezcla con la gastronomía creando verdaderas obras mágicas. El menú es simple: hamburguesas, paninis, alitas y pizzas. Nada te quitará la magia del paladar, pero también te aseguramos que al terminarte unas picosas alitas te sentirás como Superman.
Este restaurante también tiene sucursales en León, Guanajuato; Nogales, Sonora y Chihuahua, Chihuahua.
3. La Calle
Rodeado de balcones y ventanales de los años 40, entre una marquesina y una bicicleta, podrás disfrutar de maravillosos platillos. Este restaurante te conquistará por su decoración nostálgica, la cual te hará sentir como si estuvieras inmerso en una película de la época de oro del cine nacional.
Literalmente comerás sobre el pavimento, con faroles sobre la banqueta, y coladeras a un costado. Además, las paredes están pintadas como las típicas fachadas coloniales del México del siglo pasado. Platillos típicos mexicanos componen la carta, los ingredientes son frescos y se pueden degustar desde típicos taquitos hasta las jugosas carnes. Los meseros visten de policías y el pan, una tradición de nuestro país, es algo que no debes dejar de probar.
4. Mesón del Cid
Magia medieval, juglares, danzas y música, son la parafernalia de este restaurante. Apenas cruces el umbral, te sentirás como un caballero del siglo XI. Grandes velas iluminan las mesas, meseros con túnicas y adornos del medievo conquistarán tus ojos.
La carta va de la mano con el concepto (domina la gastronomía española), entre los que destaca una sabrosa sopa de cola de res, pate de faisán, chipirones en su tinta y un espectacular lechón estilo Cándido increíblemente emplatado.
Todos los sábados por la noche ofrecen cenas medievales con música y danzas. Un espectáculo para todos los sentidos.
5. Adonis
El Medio Oriente al alcance de tus manos. La arquitectura es típica de un cuento de “Las mil y una noches”: arcos, lámparas doradas, manteles blancos, columnas y esculturas.
La carta es libanesa y contiene productos directamente importados de este país: especias, aceitunas y aceite de oliva. Hay muchos platillos para escoger, pero sin lugar a dudas recomendamos Las hojas de parra y Msakaa. Si quieres probar de todo un poco, entonces pide el plato libanés.
Los fines de semana ofrecen danzas árabes y cantos, mientras degustas un buen vino.
